Sección arroz: 4 personas, preparación 10 minutos, cocción 30 minutos totales sofrita y paella, fácil.
Ingredientes para la receta:
400 g de arroz, 300 g de pollo, 300 g de costilla de cerdo, 300 g de conejo, 200 g de judías verdes, arroz, 2 tomates, agua para la cocción, aceite de oliva, azafrán o colorante y sal.
Preparación y cocción:
Lavar y quitar las hebras a las judías, cortarlas en
trozos de 5 cm y reservarlas.
Limpiar el pollo, deshuesarlo y reservar los huesos.
Cocer la carcasa y los huesos del pollo, en una cazuela
con 1½ l de agua, espumar, salar y cuando esté, colarlo y reservarlo.
Poner las carnes en trozos en la paella con un poco de
aceite, sofreírla y retirarla.
Pelar los tomates y picarlos en trozos pequeños,
sofreírlos en un poco de aceite, pasados unos minutos añadir las judías,
rehogarlo, reincorporar la carne y seguir rehogando unos minutos.
Cubrir con agua y cocer hasta se consuma el caldo o estén
tiernas la carne y las verduras.
Añadir el arroz, rehogarlo, verter el doble de caldo que,
de arroz, corregir de sal y poner el azafrán o colorante.
Poner el fuego al máximo y cuando empiece a hervir bajar
a medio, cocinar de 20 a 25 minutos hasta que esté el arroz y haya absorbido
todo el caldo.
Sacar y dejar que repose unos 5 minutos tapado con un
paño.
Arroz
Desde el Lejano Oriente el arroz comenzó su difusión
hacia Occidente solo después de milenios, llegando a Mesopotamia, donde se
cultivó en el siglo IV a.C., para llegar a Europa como producto alimenticio con
Alejandro Magno. Incluso antes de los griegos, fue el rey de Persia que, hacia
finales del siglo VI. BC, ordena exploraciones en Asia a Scillace, el primero
de los griegos en hacer un viaje a lo largo del río Indo, que relata cómo el
cereal se arraiga en los territorios del actual Pakistán.
Pollo
Las fuentes establecen que los primeros ejemplares fueron domesticados en
la llanura del Indo en el año 4.000 a. C. y luego llegaron a Grecia siguiendo
al Ejército de Oriente liderado por Alejandro Magno.En la antigua Roma el pollo
es llamaba Catone, Varrone y Columella. Hacia 1600 el pollo se consagró como el
símbolo del bienestar económico de las grandes familias de la época,
convirtiéndose en protagonista de las recetas más buscadas para deleitar los
paladares de personajes como Enrique IV y la reina María Antonieta, pasando
incluso por el de Napoleón. mesa. En la actualidad, podemos decir que la carne
de ave se encuentra entre los alimentos más consumidos en el mundo, gracias a
sus diversas propiedades nutricionales que la hacen ideal para todas las edades
de la población y para quienes practican deportes a nivel competitivo y nivel
no competitivo.
Costilla de cerdo
El hueso de la costilla aporta jugosidad y sabor a la
carne y la protege cuando la cocinamos, por lo que es uno de los cortes
favoritos para todo tipo de preparaciones. Para los amantes de la barbacoa, las
costillas de cerdo son un plus para añadir y algo indispensable. A veces se
opta por auténticos cortes maestros y se opta por ofrecer cortes de carne
particulares. Otras veces, sin embargo, se vuelca sin discusión en lo más
clásico que puede haber y combina los finos cortes con un buen costillar. La diferencia
entre costillas de ternera y costillas de cerdo ya está clara y anticuada,
ahora hace falta entrar en detalles y encontrar otras nociones capaces de
sorprender a los comensales entre una cerveza y otra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario