Seguimos rellenando los huevos para hacerlos esta vez con
jamón y decorados con tiras. Sera otra idea para ponerlo en Navidad como
aperitivo o comerlos cualquier día de la semana.
Sección Huevo: 4
personas, preparación 15 minutos.
Dificultad fácil. Todos
los tiempos son siempre indicativos.
Ingredientes para la receta:
4 huevos o más, 100 g de jamón mas 50 g de tras de jamo,
queso crema 2 cucharadas, mayonesa, perejil, agua para la cocción y sal
Preparación y cocción:
Cocer los huevos, dejar enfriar y pelar reservar.
Partirlos por la mitad y retirar las yemas.
En un bol poner las yemas reservando algunas para la decoración, de los
huevos, el jamón, el queso y un poco de mayonesa y triturar todo hasta
conseguir una crema y mezclar y salar si lo necesita.
Ver la consistencia de la crema y añadirle más mayonesa si fuese necesario,
rellenar los huevos decorarlos con las yemas desmenuzads por encima y una tira
de jamón.
Colocar al gusto en fuente o platos los huevos meterlos en la nevera
tapados.
Antes de servirlos sacarlos de la nevera unos minutos espolvorear con el
perejil y servir.
La preparación de un
huevo duro consiste simplemente en sumergirlo de forma natural, con cáscara
incluida, en un recipiente que contenga agua hirviendo, y luego dejarlo allí
entre 8 y 10 minutos, dependiendo de su tamaño. Si el tiempo de cocción es
corto, la yema permanecerá líquida, aunque más densa que la cruda, y
básicamente tendrás un huevo líquido. Por el contrario, si se excede el tiempo
de cocción la yema tiende a volverse verdosa debido a la liberación de
compuestos sulfurosos.
La
historia del jamón
Es
fascinante y se remonta a miles de años. Este producto cárnico, que proviene de
la pierna trasera del cerdo, ha sido parte importante de la dieta humana en
diversas culturas a lo largo del tiempo. El jamón tiene sus raíces en la
antigüedad. Existen evidencias de que los cerdos fueron domesticados alrededor
del año 5000 a.C. en Asia, y su carne comenzó a ser consumida por las
comunidades humanas. En España, el jamón ibérico empezó a ganar reconocimiento
por su calidad, particularmente el jamón de cerdos alimentados con bellotas en
la Dehesa, un tipo de bosque mediterráneo. Con el tiempo, el jamón se exportó a
otras partes del mundo, ganando popularidad en América y Asia. Hoy en día, el
jamón es un alimento apreciado en todo el mundo. Se pueden encontrar diversas
variedades, como el jamón serrano de España, el prosciutto de Italia, el jambon
de París en Francia, y muchas más. Estas variantes son celebradas en
gastronomías nacionales y son una parte esencial de festividades y
celebraciones. Hoy en día, el jamón se presenta en diversas formas y estilos en
las tiendas, adaptándose a las preferencias de los consumidores y a diferentes
usos culinario. jamón curado, cocido, ahumado, loncheado, en tacos, tiras y
muchas más.
El queso crema es un
tipo de queso fresco de textura suave y untuosa. Está hecho principalmente de
leche y crema, lo que le otorga su característica cremosidad y sabor
ligeramente ácido. Es un producto lácteo que no requiere un proceso de
maduración prolongado, lo que significa que puede consumirse poco después de su
elaboración. El contenido de grasa del queso crema puede variar, pero
normalmente oscila entre un 33% y un 45%. La historia se remonta a siglos
atrás, aunque su forma moderna se desarrolla en Estados Unidos en el siglo XIX.
Se cree que un queso similar al queso crema ya se producía en Europa, pero la
versión comercial más conocida fue creada en 1872 por un agricultor llamado
William Lawrence en Nueva York. Lawrence accidentalmente descubrió un método
para hacer un queso suave y cremoso, que rápidamente ganó popularidad. En 1880,
el queso crema comenzó a ser producido en masa y, para 1900, se introdujo el
famoso "Philadelphia Cream Cheese", que se convirtió en sinónimo del
producto en muchos lugares del mundo. Desde entonces, el queso crema ha sido un
ingrediente popular en numerosas recetas, especialmente en la cocina
estadounidense. El queso crema es un ingrediente sumamente versátil que se
utiliza en una variedad de aplicaciones culinarias: es un complemento ideal
para panes, bagels y galletas saladas. Su suavidad lo hace fácil de untar y
combina bien con diversas salsas e ingredientes como hierbas, especias y
frutas. En resumen, el queso crema es un ingrediente esencial en muchas
cocinas, conocido por su textura suave y versatilidad. Desde sus humildes
comienzos hasta su uso en la alta cocina, ha conquistado paladares de todo el
mundo, convirtiéndose en un favorito tanto en platos dulces como salados.

No hay comentarios:
Publicar un comentario